El Atleti lo volverá a hacer. Volverá a liarla. Venderá al Kun Agüero. Otra nefasta gestión de la directiva del club roji-blanco, causará problemas a un equipo que es un ‘querer y no poder’. El Atleti, si tuviera una directiva que actuará más por los intereses del club que por los suyos, sería sin lugar a dudas el tercer equipo de España. ¿Por qué? Es sencillo. Porque formando una filosofía y de juego sólida, combinada con la que es probablemente una de las mejores aficiones de Primera División, el Atleti sería grande, muy grande.
Pero no. El Atleti tardará en llegar a eso, si es que algún día llega. Muchos aficionados están cansados de esta situación con la directiva, pero pocos son los que se manifiestan contra ella. No creo que sea miedo, ni mucho menos pereza. Creo que es la desilusión que cada vez se apodera más de todos aquellos, cuyo club de sus amores es el Atlético de Madrid. Hace unos días, vivíamos en nuestras propias carnes, las protestas de muchos españoles para que exista una democracia real. En el fútbol también debería ser así. Y el deseo de todos los colchoneros, al menos de los que son conocedores de la situación, o por lo menos de los que se manifiestan, es que la directiva actual se vaya para que el club crezca. Y no sucede. Reiteradas son las malas gestiones de esta directiva, empezando por los entrenadores y continuando con jugadores históricos del club, como Fernando Torres y ahora, Sergio Agüero.
Javier Aguirre, a los colchoneros más recientes, puede que no le suene demasiado ese nombre. Con ese entrenador el Atleti brilló en el juego. ¿Qué pasó? Lo echaron a patadas. Ahora, se repite la historia con Quique Flores. Les ha hecho ganar un doblete: Europa League y Copa del Rey, y también lo echan como si de lo peor se tratara. No es lógico, y esto pasa con la directiva y esta vez sí, también está la afición de por medio. Cuando las cosas van mal, es culpa del entrenador y cuando van bien, él no tiene nada que ver. Esta es lo que piensa mucha gente, y no. Jugadores y cuerpo técnico son partícipes de las malas y de las buenas rachas. Ni de unas más, ni de otras menos.
Hace unos años vivíamos la dramática salida, pero lógica y advertida, de Fernando Torres del club colchonero. Se ‘tapó’ y ‘consoló’ con la llegada de un joven futbolista, que prometía mucho, y que respondía al nombre de Sergio Agüero, aunque todo el mundo lo llamaba Kun.
Hoy, en 2011, cinco años después, vivimos de nuevo la misma situación. Esta vez, con el que, el día que se marchó el ídolo de la afición colchonera, hizo que el Calderón volviera a soñar y a ilusionarse. El Kun Agüero repite la historia de su antecesor, Fernando Torres.
Agüero deja el Atlético de Madrid. Probablemente no se marchará lejos del Vicente Calderón, puesto que seguramente se vaya al otro campo de la ciudad madrileña, el Santiago Bernabéu. Probablemente, no habrá silbidos cuando juegue, ni insultos de por medio, no habrá cabida para el odio al Kun. Porque si algo caracteriza a la afición colchonera, además de ser incansable, es que es generosa. Lo fue en su día con Torres y lo será ahora con Agüero. Lo merece. Sólo permanecerán en el recuerdo los tantísimos goles marcados, esas jugadas increíbles, los títulos conseguidos y la sonrisa permanente del Kun, a la que ha sido su afición y que siempre le ha respaldado.
Seguramente, el mensaje de la afición al Kun sea: “¡Hasta pronto crack!”. Porque jugadores tan importantes, como lo ha sido Torres y como lo ha sido Agüero, no se olvidan.
Quizá, ambos juntos vuelvan algún día a hacer soñar al Calderón, pero es muy difícil. Mucho tienen que cambiar las cosas en el club roji-blanco, y sus respectivas carreras, también.
A lo mejor, no tardando mucho vivimos otra vez esta situación, pero con David De Gea. Y así pasará una y otra vez, si la situación del club no cambia. Una lástima, porque si la directiva fuera otra, otro gallo cantaría.
¡Mucha suerte Kun!
Paula Martín.
@Valdesita1
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